Si algo hemos aprendido de la pandemia del COVID19, es la relevancia de la educación a distancia y el trabajo remoto. Cuando se cerró el país a mitad de marzo, todos nos vimos obligados a utilizar plataformas virtuales para darle continuidad a los procesos académicos y administrativos.
Para muchos compañeros de la facultad fue un proceso sumamente difícil ya que a duras penas utilizaban Blackboard para subir el bosquejo del curso. Mucho menos estaban acostumbrados a utilizar plataformas virtuales para ofrecer su curso. Se vieron obligados a utilizar Blackboard Collaborate o buscar otras opciones para terminar sus cursos.
Muchos utilizaron Zoom, Whatsapp, correo electrónico para darle la continuidad necesaria a sus cursos. En adición al uso de Blackboard, aún existe la dificultad de la disponibilidad de conexiones a Internet de los estudiantes. Para muchos de ellos, el único acceso a Internet es a través de su teléfono inteligente. A eso le sumamos la saturación de las conexiones a Internet ya que todos los que teníamos la opción de trabajo remoto nos conectábamos también. Bien que recuerdo las veces que se me caía el VPN cuando trataba de trabajar remoto. Para mi esa fue una experiencia sumamente difícil por la complejidad de algunos de los trabajos que tengo que hacer. Trabajos que en la oficina completo en 15 minutos, en el trabajo remoto se tardaban hasta 1 hora, y había ocasiones en que no podía completar los procesos, lo cual me hacía sentir muy frustrada y como que no estaba dando el 100%.
En fin, fueron momentos difíciles pero hasta el momento he sobrevivido y sigo con mi maestría totalmente en línea. Bueno es que siempre ha sido en línea ya que estoy en UAGM Recinto Online.
Después de esta crisis, creo que el Internet ya es un servicio básico, pues mediante esta herramienta realizamos muchas transacciones y por el momento es la sala de clase virtual de los estudiantes de todos los niveles. Por tal razón se deben buscar alternativas para que los estudiantes puedan acceder el Internet y tengan la misma oportunidad de lograr su proceso de enseñanza/aprendizaje independientemente de su situación económica.